Publicación Acción

Es necesario expresar libremente el pensamiento político para el fortalecimiento de nuestro sistema democratico, republicano y representativo.



miércoles, 24 de diciembre de 2025

CAMBIO EN LOS OBJETIVOS DE UNA TENDENCIA MODERNA

 


Por     

Lic. Fernán Camilo Álvarez Consuegra

Editor de PUBLICACIÓNACCION

 

Los Derechos Humanos, es el mayor avance del racionalista moderno, pero ya en los orígenes del cristianismo, los principios de igualdad, dignidad y solidaridad con el prójimo, eran la base de la aplicación terrenal de la religión. Las bases filosóficas de los principios de los Derechos Humanos fueron desarrolladas por el cristianismo, pero después de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el 10 de diciembre de 1948, se siguió una corriente racionalista, que han seguido los gobiernos occidentales.

 

Entre 1978 y 1982, el criminólogo Howard Zehr, concibió la idea de encarar a la víctima con el victimario, dando inicio a la aplicación de la justicia restaurativa, como forma de reparación emocional y social, entre la víctima y el victimario; este enfoque, fue basado en su experiencia en el crimen común de los Estados Unidos e imbuido, en las ideas Menonitas (pacifistas practicantes - secta derivada del movimiento anabaptista, rama de la Reforma Protestante-).

 

Estas ideas, nacidas de una concepción religiosa y aplicadas a los delitos comunes, derivados de actos individuales y generalmente de naturaleza doméstica, en la Eastern Mennonite University (EMU), se desarrolló el concepto de Justicia Restaurativa, y con posterioridad, se aplicó conjuntamente, con la Justicia Transicional, que es un concepto de izquierda, para explicar la transición operativa, de un Gobierno participante de un conflicto  global de baja intensidad, a la normalidad democrática en tiempos de paz, en una suerte de formula política universal, para tratar conflictos derivados de la geopolítica,

 

La Justicia Transicional, es un concepto surgido en las universidades progresistas de Estados Unidos, popularizándose a partir de 1995, luego de finalizada la Guerra Fría, y observando la transición hacia la democracia en Hispanoamérica.

 

La conjunción de estas dos teorías, la Justicia Transicional y la Justicia Restaurativa, dio lugar a una tercera corriente:  la aplicación de una jurisdicción universal para crímenes contra los Derechos Humanos, atribuyéndole una naturaleza universal, que exige, que ciudadanos de un Estado, se sometan a la jurisdicción de otro Estado, sin el nexo de la relación “real o de defensa”, sino la de una acción cometida contra un ser humano, que a criterio “político”, atenta contra los Derechos Humanos”. Esto ha implicado una legislación supranacional, que en varios casos, ha implicado situaciones de tensión internacional innecesaria, en varios casos. Como ejemplo cito: la orden de captura de un juez español, contra del Presidente de China, por violaciones de Derechos Humanos en el Tíbet, al conocerse su visita de Estado a ese país.

 

En la práctica, permitió a la izquierda, mantener viva la lucha de los años de la Guerra Fría y organizaciones de abogados de Derechos Humanos, pudieron generar litigios de impacto, o “litigio estratégico” (que pretende utilizar el poder judicial de los jueces para promover cambios políticos – la derogación de la ley de amnistía en El Salvador, fue producto de esta forma de utilización del poder judicial -), realizando un activismo político desde el Órgano Judicial, que en consecuencia sostener organizaciones especializadas en tales litigios, sin que hubiera un beneficio o encaramiento con las víctimas, salvo en los medios de comunicación, redes sociales o publicaciones sensacionalistas.

 

Los Derechos Humanos tienen retos nuevos, surgidos de problemas sociales actuales, sin relación con la lucha política de la pasada Guerra Fría. Los derechos de los migrantes y el derecho a la identidad nacional frente a la emigración ilegal. El racismo estructural y el derecho a la preservación de la identidad cultural del país asilante. La mala gestión de los Gobiernos que esterilizan a sus países, obligando a la emigración y exigiendo que sus identidades y luchas internas, sean asimiladas y substituyan a culturas extranjeras. El rompimiento del Estado de Derecho, que inclina la balanza de los derechos en favor del Estado, que manipula el Gobierno para su beneficio personal. So problemas filosóficos a resolver a la luz de los principios de los Derechos Humanos

 

La invasión a Ucrania, el conflicto Palestino-israelí, la desintegración política del Sahel, crean nuevos conflictos y violaciones a los Derechos Humanos que deben de ser discutidos.

 

La pretensión de aplicar una Justicia Universal, sin el alineamiento político nacional, rompe la soberanía de un Estado y deforma su derecho interno, creando procedimientos ad hoc, que no conducen a un fin de justicia. En El Salvador, podemos citar como ejemplos, el Caso Mozote, que ha finalizado su instrucción luego de siete años, sin la individualización del hecho y pretendiendo un castigo colectivo, a una unidad militar específica, o el Caso Jesuitas, reabierto en 2022 en el mismo proceso judicial ya fenecido en 2003, existiendo en el medio dos sobreseimientos definitivos y la negativa, de reconocer la matanza de Nueva Trinidad, hecho atribuible al FMLN.

 

Podemos ver en Perú y Argentina, manifestaciones públicas y acciones de Gobierno para poner fin a la corriente de Derechos Humanos, surgido del pensamiento “Woke” y enfocarse en los retos actuales de los Derechos Humanos.

 

El término “Wokismo”, se popularizó con el movimiento “Black Lives Metter”, aunque sus orígenes los podemos remontar a la Revolución de París de 1968 o “Mayo Frances”, que dio inicio a un cambio en el pensamiento intelectual, que, al correr de los años, se asentó en las Universidades de  los Estados Unidos.

 

La aplicación de los principios de los Derechos Humanos es la mayor expresión del racionalismo, pero cuando se utilizan para el lucro personal a costa de la violación de los Derechos Humanos de otros, se vuelven la mayor aberración humana.

 

PUBLICACION ACCION y sus colaboradores, les desean una FELIZ NAVIDAD, desenando que el NIÑO JESUS, derrame su bendiciones y que a todas las personas que se les esta este dia violando sus Derechos Humanos, tengan un rayo de esperanza.