Por
Lic. Fernán
Camilo Álvarez Consuegra
San Salvador, 18
de febrero de 2014.
“Llegó la hora de salir a las calles”,
dijo a sus seguidores Maduro, el sábado 15 de febrero, tras cuatro días de
conflicto por que el pueblo venezolano lucha en las calles por su libertad y porque
ve, el suelo de la patria hollado por los seiscientos soldados Cubanos y los ya
sesenta mil médicos y demás profesionales que han llegado para sostener el
régimen socialista desde la época de Hugo Chávez, pues ya Nicolás maduro
cuestiona la lealtad de su policía política (Servicio Bolivariano de
Inteligencia) y posiblemente, ….. la de las Fuerzas Armadas venezolanas.
Posiblemente, es
sólo cuestión de días o de meses, para que el principal y más fuerte régimen
socialista del siglo XXI caiga. Entre tanto, puede consolidarse otro aquí, en
El Salvador, si la ciudadanía no comprende el peligro y riesgo que encierra la
actual política del FMLN: populismo, doble discurso, preparación para un conflicto interno y un posible relevo
presidencial. Hechos que han sido una constante en el Gobierno Venezolano.
El discurso
asistencialista es lo que más ha interesado a una población necesitada,
agobiada por la actual crisis económica y que, el futuro gobierno, ya sea de
ARENA o del FMLN deberá mantener, para evitar un colapso social pero que, muy
sutilmente, ha ido suprimiendo el Gobierno de Funes “asiéndolo más selectivo”,
pues su política de enfrentamiento con la empresa privada a la postre, ha
disminuido la productividad de El Salvador y, en consecuencia, su capacidad de
recaudación fiscal, por lo cual urgen “nuevas fuentes” que sólo pueden provenir
de los bienes hoy todavía privados.
El doble
discurso del FMLN, está creando una situación de peligro impredecible, en
cuanto a tiempo y efecto pues públicamente, se presentan Salvador Sánchez Cerén
y Oscar Ortiz como personas de Izquierda “light” pero a sus bases las alientan
con la perspectiva de la revolución y preparan a las pandillas “Salvatrucha” y “18”
como nuevos cuadros de choque. Así, su imagen de Izquierda “moderada” es para
la sociedad de clase media urbana y a la Derecha en general, presentándose como
una pareja de gobernantes “aceptable”, por lo que, una lucha electoral fuerte
carece de sentido, si los fundamentos del sistema democrático y de las
libertades políticas y económicas serán respetadas, al igual que la propiedad
privada. Sin embargo, basta ver los actos preparatorios que han dictado a sus
antiguos cuadros y las maras, para entender que su intención es todo lo
opuesto. El libro “CON SUEÑOS SE ESCRIBE LA VIDA, autobiografía de un
revolucionario” de Salvador Sánchez Cerén, plasma sus principios y su
convicción marxista y revolucionaria. Insinuando ya una posibilidad de los
cambios constitucionales y sociales que serían necesarios para la instauración
del Socialismo del Siglo XXI.
Los comentarios
que surgen de todas las áreas rurales y de la fuerte presencia pandilleril,
sobre la organización que está creando el FMLN, bajo una cobertura electoral,
se asemejan a las auto – defensas bolivarianas de Venezuela, las que fueron
creadas para la defensa de la revolución y la expansión de la misma. Estos
comentarios pueden parecer extraños para quienes l no vivieron el pasado
conflicto armado aquí en El Salvador, o para quienes creen sencillamente en que sólo estamos en un
período electoral sin trascendencia.
La psiquis de la
cúpula del FMLN, aún piensa con nostalgia en su época de guerra, lo cual nubla la
visión de la realidad nacional actual; Pero que, no por ello, internamente,
dejan de realizar acciones que son claramente, antidemocráticas. El FMLN es la
única institución política que no ha tenido una renovación en su cúpula, en los
últimos veinte años.
En algunos círculos,
quiere presentarse la imagen de un Sánchez Cerén como un candidato deteriorado
y con un período presidencial breve, lo que daría a la larga, la presidencia de
un Social Demócrata, razón por la cual,
todo esfuerzo electoral para que el FMLN radical (comunista y maoísta) no
triunfe, sería inútil, pues se tendría una Izquierda moderada, con la cual se
podría convivir cómodamente. Es esta una vana ilusión, pues finalice su período
Sánchez Cerén o no, la cúpula del FMLN, es la que detentaría el poder real, por
poseer el dinero de ALBA y la mayor fuerza política dentro del mismo FMLN. Es
más, podría también darse una radicalización, para unificar las posiciones
dentro del FMLN, tal como ha sucedido en Venezuela, tras la muerte de Chávez.
Las exposiciones
de los Generales Juan Orlando Zepeda y Mauricio Ernesto Vargas en una
intervención televisiva, al afirmar que la institucionalidad del país está en
riesgo, es una verdad y apreciación incontrovertible y también lo es como ellos
lo afirmaron que en la actual campaña política no se está decidiendo por uno u
otro candidato nada mas: en esta elección estamos realmente, decidiendo por la
futura forma de gobierno del país. Y esta es la lección que los sucesos de Venezuela
nos obliga a comprender.
No hay comentarios:
Publicar un comentario