Por Lic. Fernán Camilo Álvarez Consuegra
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El fenómeno de la Derecha:
Para la mayoría de los políticos, la Derecha está representada únicamente, por los partidos políticos. Los partidos políticos que hoy proclaman situarse dentro de la Derecha son: PDC (hoy PES), PCN (hoy CN), GANA y ARENA. Por esta limitada representación de tal doctrina, se ignora que la Derecha, es visión y móvil de las acciones de todos los ciudadanos que pretenden vivir bajo un régimen REPUBLICANO, DEMOCRÁTICO Y REPRESENTATIVO.
Para dar mayor precisión al concepto Derecha, débese puntualizar primero la amplitud del mismo: es el principio de libertad individual, que, desde hace dos siglos y medio, fue formulado por la doctrina del liberalismo, la cual prescribe libertad plena en tres grandes dimensiones de la actividad humana: la religiosa, la política y la económica.
El concepto de Derecha, sosteniendo siempre sus principios básicos, ha sido dinámico en todo tiempo, adaptándose a las cambiantes realidades sociales, dando solución a todo conflicto humano, por la misma ley que ha sustentado la evolución: la adaptabilidad a los nuevos entornos. Esto se ha logrado, por medio de la aplicación del principio de libertad individual, sin que tenga más limite que la ley.
La Derecha partidaria en nuestro país:
Al discutir política y partidariamente una alianza para enfrentar las elecciones del 2014 o cualquier otra elección presidencial, con el éxito deseado, se presenta una y otra vez la siguiente interrogante: ¿Podrán unirse los diferentes partidos con ideología común, para presentar al país una visión unificada, que le permita el desarrollo social deseado? Para responder a esta pregunta debemos analizar las diferentes peculiaridades de los partidos a unirse, considerando su posición ideológica real y no, la que se expresa popularmente o se sostiene en sus estatutos. El votante aprecia tanto la oferta de campaña de los partidos, como su proceder en el ejercicio del Gobierno, ya sea este Municipal, Legislativo o Ejecutivo. Además, habrá que tomar en cuenta, el apoyo popular que cada partido posee y también, la extensión de sus estructuras partidarias, así también la disciplina conque actúan y, la razón de su cohesión.
No obstante que las estructuras del PES y CN, abarcan la totalidad del país, su estructura partidaria es mínima. En este momento, la aceptación popular de estos partidos es ínfima, no acumulando entre ellos, más de 150,000 votos, en las pasadas elecciones, lo cual hace presuponer que, frente a una elección presidencial, con los candidatos de partidos , con mayor posibilidad de triunfo, su votación decaería hasta cerca del número de sus estructuras. Por lo que es de esperar que busquen una unión mediante negociaciones con los partidos mayoritarios. Sin embargo, pese al principio “que cada voto cuenta” en una elección presidencial, lo que se estaría negociando es más el nombre del partido que, el aporte numérico de votantes para la elección, y en consecuencia, sus alianzas exigirían, para el partido mayoritario, una cuota de poder dentro del Ejecutivo, muy elevada, comparativamente a su aporte en votantes.
Considerando que en caso de una alianza, débese tomar en cuenta la trayectoria de estos dos partidos, pues que no ha sido siempre apegada a los principios de la Derecha, es de esperar cierto descontento con sectores de votantes de la Derecha, principalmente con aquellos adultos mayores que llevan una vida política activa desde los años 80´s; época en que la Democracia Cristiana tuvo el poder y, realizó acciones políticas ideológicamente contrarias al liberalismo y sí muy apegadas a las propuestas del FMLN, en su época guerrillera. Para borrar sus acciones pasadas y obtener la aceptación plena, es decir sin objeción alguna a su verdadera posición ideológica, no basta un cambio de nombre, por razones coyunturales si sus dirigentes son los mismos.
GANA, partido constituido inicialmente, de una escisión de ARENA, ha probado haber adquirido una fuerza independiente del partido de su origen. Su estructura partidaria, que ya abarca la totalidad del territorio nacional, le permite tener una constante presencia en la política. Además las apariciones de Tony Saca (a quien se le atribuye la escisión de GANA) en los medios de comunicación, permiten al público asociar, su presencia con la del partido GANA; partido que sin hacer propaganda directa sobre Saca, en períodos no eleccionarios, mantiene una presencia política activa. Los 230,000 votos logrados en las elecciones pasadas por GANA, le sitúan como una tercera fuerza política del país, pero muy por debajo de los dos partidos mayoritarios: ARENA y el FMLN.
Al estudiar el origen de sus votos de GANA, se percibe que proceden de la clase media urbana y de la juventud. El voto de GANA, procede del voto flotante del FMLN, no del su voto duro de éste. El voto obtenido por GANA procede del obtenido por Mauricio Funes durante su campaña electoral del 2008 y 2009, lo cual muestra el descontento, tanto con el FMLN como con ARENA. Esto permite suponer que, en una alianza entre GANA y ARENA, el voto de GANA, sería expresado mayoritariamente en una abstención. Es notorio que la estructura partidaria de GANA, es sostenida por grandes aportes económicos, de los cuales carece ARENA.
En cuanto a la ideología, GANA pregona ser de Derecha, pero sus alianzas parlamentarias no son congruentes con dicha ideología; mas bien, con una posición de centro: unas veces muy cercano a la izquierda y, otras, las menos, a la Derecha, según su conveniencia coyuntural. Además, su cercanía y participación encubierta, en algunos Ministerios del Gobierno de Mauricio Funes, le obligan a seguir las líneas políticas del Presidente. Es por esto, muy difícil que el votante de Derecha, pueda aprobar una alianza con este partido. Además, las fricciones generadas entre las estructuras partidarias, por la escisión del 2009 y su posterior constitución en partido político, en enero del 2010, hace muy difícil una alianza, unión o integración de GANA con ARENA. Tal alianza implicaría, el desplazamiento forzoso de una estructura de mandos altos y medios, tanto de uno o del otro. Además, es notorio que Tony Saca es quien pretende ser el candidato de la Derecha unificada para el 2014; lo que volvería más conflictiva aún, la alianza entre ARENA y su partido disidente, sin contar en que no habría plena seguridad del enfoque ideológico de éste ni de su lealtad para los otros sectores, no partidarios de Derecha.
En cuanto a ARENA, que fue el ganador en las pasadas elecciones legislativas y municipales, ha visto opacado su triunfo, por la nueva correlación de fuerzas en la Asamblea Legislativa, que lo aislaron de la mayoría de las decisiones dentro de la Asamblea Legislativa; también es evidente, el retiro del apoyo por parte del Ejecutivo, a la continuidad de los proyectos municipales a las Alcaldías de ARENA.
Si consideramos que el FMLN es la expresión de la izquierda partidaria, todos aquellos partidos que hayan constituido con él un bloque parlamentario, van a ser de izquierda o por lo menos simpatizantes de dicha tendencia política, siendo en consecuencia, contrarios a la Derecha, realidad ideológica que no puede ser rebatida por la propaganda.
La necesidad de negociación en la Asamblea Legislativa, para la aprobación del presupuesto y de los prestamos (voto calificado), necesarios para la gobernabilidad, da al votante duro de Derecha, un mensaje de debilidad, que podría ser contrarrestado por un fuerte activismo partidario, pero el cual no se esta llevando a cabo todavía. La debilidad que presenta en este momento ARENA es por que las expectativas aún no resueltas, sobre quien será el candidato a la presidencial del 2014. Circunstancia, que pone en desventaja a ARENA, frente a su mayor competidor, el FMLN. Este partido de izquierda, confía, primero, en su fuerte estructura ( la cual en este momento esta siento fortalecida por un activismo celular) y segundo, la dependencia económica del votante de los proyectos de beneficio público, dados por el Ejecutivo, más efectivos que la propaganda electoral.
Es evidente que la falta de actividad organizativa de ARENA, en el presente, se debe a la falta de aportes económicos necesarios para esta actividad; de lo cual, se deduce, que se han unido la crisis económica y las amenazas, por parte del Ejecutivo, a sancionar a los grandes financiadores del partido, por medio de nuevos impuestos o trabas a las inversiones.
La falta de recursos económicos, coloca a ARENA, en gran desventaja con el FMLN, que por ser partido en el Gobierno posee, como es natural, un mayor financiamiento, tanto nacional, como externo, por vía de los intereses venezolanos, de los que es partidario ideológicamente y, cuya ayuda, quedó al descubierto en las pasadas elecciones presidenciales.
Una Derecha Integral:
Para la elección del 2014, sería ideal y conveniente a los intereses nacionales, que giran en torno a los principios de libertad, una Derecha integral. Los tres sectores de Derecha, están constituidos por las agrupaciones ideológicas, la empresa privada y, la representación partidaria. El funcionamiento conjunto de estos tres grandes grupos, logró desde 1980, enfrentar el giro político hacia el socialismo, iniciado luego del golpe de Estado de 1979 y que, en aquel momento, evitó la toma del poder por parte del comunismo internacional.
La Derecha ideológica está conformada por: las organizaciones cívicas, que difunden las ideas del liberalismo; las Universidades que exponen públicamente estas ideas, analizando los problemas nacionales y, dando soluciones a los mismos y; por último, FUSADES como el mayor centro de investigación y análisis político del país.
La Derecha económica, la integran todas las organizaciones gremiales, que aglutinan la actividad privada dentro del territorio nacional, defendiendo el interés económico desde el del vendedor ambulante, hasta el del gran empresario. Esta defensa, aparentemente contradictoria, se debe a que hay una relación vertical y horizontal entre los diferentes sujetos económicos, íntimamente entrelazados, para crear toda la actividad económica nacional. Por otra parte, todos, grandes y pequeños, tienen una finalidad común: la voluntad de ejercer libremente su actividad económica con el mínimo de intervención del Estatal.
La Derecha partidaria es por el momento, está únicamente representada por ARENA, lo que en definitiva presenta un número de votantes insuficiente para lograr un seguro triunfo en el 2014. Cuando hablo de triunfo, no me refiero sólo a ganar las elecciones, pues hay que gobernar conforme a las ideas de Derecha. Es de esperar, que por las necesidades internas de la izquierda en general y, del FMLN en lo particular, pretendan unificarse en derredor de una figura histórica radical. Sin embargo, la estructura política que están creando, junto a las condiciones políticas y económicas del país, hacen que éste, se encontraran en un estado caótico, después de las elecciones del 2014, obstaculizando las gestiones del Ejecutivo, durante los siguientes cinco años, lo cual haría fracasar un triunfo de la Derecha en las siguientes presidenciales.
El punto de unión de las Derechas:
Encontrar un punto de entendimiento entre las diversas derechas, es fundamental. Debemos considerar que las visiones e intereses de las tres ya mencionadas, son variables según su particular interés: primero el puramente ideológico, segundo, el mercantil y gremial, y tercero, el del ejercicio práctico del poder.
El elemento común para todos los grupos de derecha es la libertad, y este se concreta en el ejercicio del sistema democrático. Es este interés común, el que debe ser el punto de partida para la unificación de la Derecha. La izquierda, socaba constantemente este sistema político, pretendiendo controlar todos los aspectos de la vida en sociedad, cerrando los espacios para expresión de la libre voluntad. En los tres grupos de derecha, han sentido la pérdida de estos espacios democráticos, según el sector, al cual se integran. Ha sido práctica, tanto en Venezuela como en Nicaragua, que se permite el libre ejercicio del juego económico, pero a costa de la perdida de la libertad política, la cual es una restricción al sistema democrático, y en favor de un creciente totalitarismo. Nosotros debemos prever un sistema parecido y actuar en su contra.
Necesidad de unión de las Derechas.
Consideramos que las tres Derechas, existen individualmente, pero sus miembros pertenecen a una a dos o a las tres Derechas, lo cual facilita una actuación conjunta y uniforme. El fin de la Derecha política es alcanzar el poder, el de la Derecha económica, realizar libremente el comercio y la producción industrial y de servicios. La Derecha ideológica, es estudiar la realidad nacional para dar solución a los problemas sociales y combatir las ideas de izquierda.
En la práctica, la Derecha ideológica y la económica, se encuentran divorciadas de la política, pues esta última, sujeta a situaciones coyunturales, su posición se fija por los fines electorales, aunque claramente defiende los intereses de los sectores económicos, desde el pleno legislativo; estas acciones no siempre son apreciadas como justas o convenientes por el votante. Esto último, debido a la presentación populista de la izquierda, la cual puede arrastrar equivocadamente a la Derecha en general.
Es muy necesario, imperativo, la coordinación de los intereses y actividades de las diferentes instituciones de Derecha, pues si bien existen las estructuras partidarias, éstas necesitan la colaboración que le puede proporcionar la Derecha económica, considerando además, que existe una estructura perenne del partido, esta se vería fortalecida por la colaboración de nuevos de otros sectores con iguales intereses, presentado un frente común y solidario, el cual iría a contrarrestar el nuevo tejido partidario que está creando el FMLN.
La Derecha ideológica, es la que debe de dar el soporte para la presentación de soluciones viables a los problemas del país, para no caer en un populismo partidario, el cual, a final de cuentas, si bien es útil en el momento de las elecciones, cobra su factura política con posteridad a ellas.
La visión de la Derecha ideológica, por no tener un interés económico, ni de ejercer directamente el poder, es el ente contralor, que garantiza que no se den desviaciones ideológicas, que puedan perjudicar los objetivos colectivos de un triunfo electoral.
La Derecha frente a la Izquierda:
Muchos analistas han propugnado que, la política actual, ya no es ideológica, lo cual es verdad, pero sólo en cierto sentido, pues la ideología en si misma, como bandera de lucha política, desapareció con la Guerra Fría. Ahora nos encontramos, en la lucha por alcanzar el bienestar que brinda la tecnología moderna. El problema fundamental para alcanzar ese propósito es: ¿cómo puede ser financiado este bienestar?: ¿Será el individuo quien, mediante su ahorro podrá alcanzar dicho bienestar en la medida de sus posibilidades, o será el Estado, el que se lo proporcionará en la medida de cómo éste, lo crea conveniente para el ciudadano?. Dentro de este contexto, la lucha de las ideologías es evidentemente, actual.
Si vemos la evolución de estas dos formas de solucionar el problema del bienestar individual y colectivo, dentro de la vida democrática, hay una tendencia de los partidos políticos, de ofrecer subsidios y bienestar, mediante la subsidiariedad del Estado, con la finalidad de poder obtener en el futuro, el voto ciudadano. Países como el nuestro, al igual que en el resto de Latinoamérica, estas propuestas son muy bien acogidas, pues la necesidad de la población, en todo nivel, es muy grande y, basta la esperanza de obtener algún beneficio material, para lograr que el ciudadano vote y haga de ese partido su preferencia electoral y vote por él. Sin embargo, la propuesta de subsidios para sufragar las necesidades de la vida, destruyen el principio de subsidiaridad, el cual es lícito, convirtiéndolo en una renta o derecho del individuo en contra del Estado, el cual no puede restringirlos, sino ampliarlo, pues de lo contrario, perdería el favor del votante. Esta forma de comprar el favor electoral “es populismo”.
La izquierda propone subsidios y cobertura estatal para los necesitados, pero al no ser selectivos, sino generales y amplios para todo el conglomerado social, hace insostenible económicamente el sistema, pues todo dinero invertido por el Estado, tiene en definitiva, que provenir de la misma sociedad por vía de impuestos. Sin embargo, con el método de endeudamiento, para sufragar gasto corriente, subsidios y cumplir las promesas de campaña, quita recursos futuros a la inversión púbica, pues toda recaudación, deberá ser para pago de deuda.
Cuando la economía colapsa por la insostenibilidad económica, siempre hay un cambio de tendencia: el votante da su voto al contrario y, es cuando nuevamente, la Derecha recupera el Gobierno, pero tendrá que reconstruir todo lo destruido por la izquierda.
El giro hacia la Derecha en Europa, ha sido provocado por la insostenibilidad de los sistemas de asistencia pública. Nosotros, los salvadoreños, hemos vivido ya dos veces este proceso en los últimos treinta años: la reforma agraria y la bancaria, impulsadas por la Democracia Cristiana en los primeros años de los 80’s, y el conflicto armado impulsado por el FMLN, que tenia como objetivo militar destruir la economía y, por último, un Gobierno que en los últimos dos años ha subido la deuda pública del 40% al 53% del PIB, hasta colocarnos al borde de la insolvencia y ,el colapso económico, en una poca honrosa comparación, con el país mas endeudado de Europa, Grecia.
Para los salvadoreños, es imperativo que logremos recuperar nuestro rumbo de bienestar económico y social que, se ha perdido por la implementación de las ideas de Izquierda. Para lograr este objetivo es imperativa la unión y cohesión de las Derechas, pues sólo así, puede garantizarse un triunfo a corto plazo, sobre la izquierda, para mantener el poder y el bienestar económico nacional, a un largo plazo.
La libertad es el bien más preciado que poseemos, hagamos uso de ella, y protejamosla con nuestro poder soberano.
