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sábado, 3 de abril de 2021

EXPLICANDO ACCIONES

 

Por      

Lic. Fernán Camilo Álvarez Consuegra

Editor de PUBLICACIÓN ACCION 

 

El triunfo electoral de Nayib Bukele, la solicitud a los latinos estadounidenses, para votar en contra de la Congresista Norma Torres, la “Lista Engels”, con señalamientos para la corrupción en Centroamérica, la insistencia del Ministro de Defensa, para que la Fuerza Armada salvadoreña, abandonando su apoliticidad, adopte papel político; son sucesos dispersos que pueden ser explicados, racional y coherentemente.

 

En los últimos años, la política exterior, ha sido analizada por el método del realismo o del neorrealismo, conjugándose en nuestro caso, tres niveles de análisis: 1) las acciones de Bukele, dictadas por su condición personal, 2) Estados Unidos reacciona al impulso de su sistema, es decir, determinado por los problemas domésticos y 3) Bukele, busca las relaciones internacionales, en apoyo de su inestabilidad nacional y en defensa, contra los señalamientos norteamericanos.

 

Los triunfos de Bukele han sido posibles, sólo gracias a la incomprensión de su estrategia: utilizar como arma política, el resentimiento y los problemas internos, ignorando las bondades del sistema que establece nuestra Constitución, basado en la libertad individual y, limitado sólo, por el interés público, responsabilizando a dicho sistema, de los males sociales; así, a mayor resistencia de los partidos políticos (como elementos del sistema), mayor oposición contra ellos. Pasadas las elecciones, son las características personales de Bukele, las que determinan sus acciones, en búsqueda del poder absoluto.

 

La actuación de Estados Unidos, es determinada, por sus intereses globales y responde, a las necesidades de su sistema, que se manifiesta en su población. Es razón, por la cual, Estados Unidos ha cambiado su política exterior, luego de la administración Trump y, presta atención a todo cuanto le amenaza:  la emigración ilegal, terrorismo y narcotráfico etc., que desestabilizando su sistema interno, perjudican a su población.

 

El viaje de Bukele, primero a Japón, luego a China y posteriormente a Catar, tuvo importancia estratégica: primero, disminuir fricciones con Japón y, segundo, consolidar nuevas relaciones internacionales. mientras se reafirma su autoritarismo, con la esperanza de que los intereses internacionales en pugna económica, con Estados Unidos, vean una oportunidad geopolítica, en Centroamérica.

 

El autoritarismo de Bukele, ha sido reforzado por el triunfo electoral de quienes le serán fieles, mientras les sean permitidos sus actos de corrupción, dándole el gusto del autoritarismo. Pero la inmensa masa de votantes que le apoyaron, espera cambios y es necesario, que exista un enemigo superior, para que su autoritarismo y corrupción, no sean relevantes y se le reviertan. Igual método, ha sido empleado en Venezuela, Bolivia y Ecuador.

 

El enemigo “clásico”, es Estados Unidos: no se toma en cuenta que, el bienestar general, se basa en un grado mínimo de tensión, que permite el mutuo entendimiento. Bukele, por el contrario, pretende escalar dicha tensión, para demostrar que este país puede utilizar, como arma, su migración y posición geográfica. En la actualidad, la emigración salvadoreña es baja, en comparación con la de Honduras, pero el decir “que no puede criminalizar a los que “ayudan” a los migrantes”, es una amenaza, de que puede aumentar la emigración o, acentuar el paso de drogas, aumentando los problemas, en la frontera sur de los Estados Unidos.

 

La propuesta de tener una Fuerza Armada política, es para que ésta, ejerciendo el voto, pueda realizar otras acciones políticas, incompatibles con el uso democrático de las armas y, se establecería, la superioridad inmediata, sobre cualquier otro grupo político. Lo que implicaría en el país, retorno a, antes del golpe del 15 de octubre de 1979.

 

Las acciones del Gobierno, internas o externas, deben determinarse, por las necesidades de su sistema y población, no por las de una sola persona o, las conveniencias geopolíticas extranjeras.

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