Por
Lic. Fernán Camilo
Álvarez Consuegra
Editor de PUBLICACIÓN
ACCIÓN
http://publicacionaccion.blogspot.com
San Salvador, 19 de
marzo de 2015.
La marcha de un sector
social o de toda la nación, tiene como
propósito la demostración de fuerza. Cuando
la marcha es expresión natural de toda la sociedad o de un sector social, es
para expresar al Gobierno, un reclamo
que se supone justo y conveniente, pero cuando
la marcha la convoca el Gobierno
mismo, tiene el propósito de crear la fuerza que legitimará sus
acciones futuras, sin necesidad de ampararse
en las fuerzas públicas (policía y Fuerza Armada).
La marcha convocada por
el Gobierno, contra la violencia y para la unidad nacional, para el día veintiséis
de este mes, tiene como uno de sus propósitos probar la fuerza y capacidad de convocatoria
del Gobierno, ante una oposición numéricamente
superior, demostrada recientemente en las urnas. El pretexto de realizar una
marcha contra la violencia, en manera
alguna afectará a la delincuencia, pero el invocarla, vuelve inobjetable la razón de la marcha, aunque los fines de
ésta sean muy diferentes.
El costo inicial de
dicha marcha se calcula en 57 millones de dólares, por causa del asueto decretado, pero este precio, palidece
con el costo político de la misma, para el sistema democrático: será esta la
primera movilización gubernamental de las muchas que posiblemente, se convocarán
en el futuro si con esta, el Gobierno obtiene el éxito esperado.
En sus respectivas
sedes, nuestras embajadas están también convocando a marchas en sus respectivos
destinos, lo que da dimensión internacional a dicho evento: pretende enviar un
mensaje de unidad nacional en apoyo a las decisiones del Ejecutivo, en cuanto a
nuestra política exterior, y además, proyecta una imagen de indiscutible
liderazgo por parte del FMLN, muy particularmente en las que serán las propuestas de esta próxima legislatura:
presupuesto, endeudamiento, impuestos y pacto con las pandillas.
No es nueva la manipulación
del empleado público: ya la hiso Mauricio Funes en una concentración de los “amigos
de Mauricio” y sus allegados en la Feria Internacional, con el fin de mostrar
su fuerza, frente al FMLN. Hoy es el
FMLN el que la realiza a nivel nacional la manipulación del aparato del Estado.
ANEP, la Cámara de Comercio y los medios de comunicación lo han denunciado ya, pero
no se ve clara la oposición del mayor partido
político: Jorge Velado, aunque sea en su carácter personal ha apoyado
la marcha, pero aunque así sea, por ser
el Presidente del partido ARENA, involucra a esta institución, en favor de
dicha marcha.
La sociedad civil debería oponerse a la acción del Gobierno, no con la
realización de una contra marcha, sino con la resistencia pasiva a la
convocatoria que ahora hacen todas las instituciones gubernamentales, comenzando
por la Procuraduría de los Derechos Humanos que, bajo el amparo de la imagen de
Monseñor Romero, realiza el llamamiento a dicha marcha.
Si hoy la sociedad civil
no muestra su rechazo pasivo a la manipulación del Gobierno, tendremos el 23 de
mayo, otro día de asueto y marcha pública, por Monseñor Romero y posiblemente otras
muchas marchas, cada vez que la oposición se haga sentir en la Asamblea
Legislativa, o urja al Gobierno mostrar
su apoyo a algún Gobierno extranjero, cuando éste viole los Derechos Humanos en
su país, como sucede hoy en Venezuela.
FE DE ERRATA: En el
editorial SITUACIONES POST ELECTORALES en el párrafo tercero debe leerse “42
diputados”
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