ACOSTUMBRADOS ESTAMOS A MULTIPLES RIDICULESES...

Por

Lic. Fernán Camilo Álvarez Consuegra

Editor de PUBLICACIÓN ACCIÓN  http://publicacionaccion.blogspot.com

San Salvador, 29 de octubre de 2014.

Si un funcionario público, quejase de las acervas críticas a su persona o a su política, por que actúa contrariando a la oposición, provoca carcajadas, ganándose con su cinismo el desprecio del ciudadano que, ante su impotencia, sólo puede castigarle con sus sátiras.

Tanto Sigfrido Reyes, como David Munguía Payes, Mauricio Funes, Vanda Pignato y otros funcionarios púbicos, han predicado AUSTERIDAD, PROBIDAD, HONESTIDAD en los gastos del Estado y más que todo, HUMILDAD PERSONAL, se  ha comprobado  todo lo contrario desde su ascenso al poder.

Uno, como Presidente de la Asamblea Legislativa, regalando corbatas de seda, porta corbatas (que ya no están de moda) y pines valiosos, con fondos del Estado como es natural, para “el buen ver de la institución”….. se asombra  el pueblo, y ríe, ríe, ríe, porque como a los payasos no le queda otro remedio que llorar mientras ríe, pues que en tanta fruslería se gaste el fruto de su trabajo (impuestos).

David Munguía Payes,  que se ha ganado el desprecio de sus compañeros de armas por sus “gustos muy particulares” de crear uniformes ridículos para la FAES y nula actuación en la guerra, por sus relaciones previas con el FMLN, se ha ganado también el sobre - nombre de “botas…nuevas” y porque  regala a Mauricio Funes, un subfusil Thompsom 45,  enchapado en oro, como  justo presente en reconocimiento a su gestión de Comandante de la Fuerza Armada; (ya Sir Winston Churchill  rechazó este tipo de arma para el Ejercito Ingles: por  un arma de “mafiosos”) y que además…..enchapada de oro, al mejor estilo de los carteles de la droga. A los salvadoreños, les ha parecido de tratándose de Munguía Payes,  un regalo muy apropiado para Funes a quien debe el generalato.

Pero no se quedó atrás Mauricio Funes, inculpando a ARENA y, a quienes hicieron público su romance fuera de borda, pero fructífero…, practicándoles   cateos de casa y amenazándoles por el desprestigio de su intimidad y, luego  de su fracaso con Vanda Pignato…..,  la que, al pretender representar, a la mujer salvadoreña, sólo la denigra: tal hace una esposa que acepta las indignidades de su marido…..  demostrando solo  “pobreza espiritual” o su interés material, y es peor más aún, si al mismo tiempo y públicamente, hace notorio su preferencia por los antiguos futbolistas….y su salud se ve desmerecida por la exigencia  de una apariencia juvenil…. ¿Para qué… para dar su ejemplo a otras mujeres?

Estamos ya acostumbrados los humildes ciudadanos  salvadoreños a ver que estos nuevos vanidosos funcionarios públicos, han hecho, parte del protocolo que, sus “ayudantes” marchen a sus espaldas, con  paraguas protegiéndolos del sol, estilo  “esclavos en el lejano oriente”. Al salvadoreño le dan risa tales “chifladuras”, pero mientras estas personas tengan siempre  al alcance de su poder, el tesoro del Estado (aunque sea producto de los prestamos) para repartirlo entre sus seguidores, conseguirán siempre  aduladores que los empujan sin consideración de lo peligroso que puede ser, al boato en un pueblo pobre. Los pueblos al fin se cansan y, sus reacciones son insospechadas.